El solsticio de invierno da comienzo entre el 20 y el 24 de diciembre, sin embargo en la viña la poda de la vid tras la caída de las hojas, marca el inicio de la estación invernal.
Esta poda tiene como objetivos primordiales seleccionar las yemas que contienen la información para la posterior producción de la uva durante la primavera.
PODA DE INVIERNO O DE PRODUCCIÓN
En la estación invernal, la poda de la vid tiene como objetivos primordiales seleccionar las yemas que contienen la información para la producción de uva en la primavera y formar las nuevas yemas para la siguiente producción anual. Esta corta se lleva a cabo cuando la vid está en reposo.
La selección de yemas se realiza en función de varios factores:
- El diámetro del sarmiento o vara donde se localizan las yemas.
- La ubicación de la yema en la planta: las yemas deben estar bien distribuidas.
- La orientación del crecimiento de la yema: las yemas que vayan a brotar deben poder crecer en forma vertical hacia arriba y alineadas con la dirección de la hilera.
La cantidad de yemas a dejar durante la poda de depende de varios factores:
- Rendimiento por hectárea deseado.
- Cantidad de plantas del viñedo por hectárea.
- Variedad de uva (por el tamaño de racimo).
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