La Semana Santa es una de las celebraciones más importantes de la religión cristiana, y el vino tiene un papel muy importante en muchas de las ceremonias y tradiciones asociadas a ella.
Durante la misa, el vino se convierte en la sangre de Cristo, y se utiliza para simbolizar su pasión y muerte. También aparece en numerosos pasajes de la Biblia y en la tradición cristiana en general, donde describen su elaboración y la importancia que tiene.
Además de su uso en las celebraciones religiosas, el vino también es una bebida que se asocia con la celebración y el compartir momentos especiales con amigos y familiares.
¿Qué vinos van mejor con los platos típicos de Semana Santa?
- Bacalao: El bacalao es muy típico de la región de León. Se trata de un pescado rico con un sabor intenso y salado, por lo que marida bien con vinos blancos secos y frescos como el Peregrino Albarin o Kyra.
- Cordero: El cordero es importante en la Semana Santa ya que era una de las pocas opciones disponibles para consumir en la antigüedad durante la Cuaresma y la Semana Santa, ya que se consideraba que era una carne magra y nutritiva que podía sustituir a la carne roja. Sin duda el tipo de vino que mejor casa con este plato son los tintos, como La Costana o Peregrino Tinto Joven.
- Torrijas: Hay quien piensa que no puede haber Semana Santa sin las torrijas, y es que éste quizás sea el postre más famoso en España durante esta semana de celebraciones y liturgia. Elaboradas con pan y leche, eran una opción nutritiva y económica que se podía consumir durante el periodo de abstinencia. Además, la canela y el azúcar que se añaden a las torrijas representan los aromas y los sabores de los perfumes que se usaban para embalsamar a los muertos en la época de Jesucristo, lo que le da a este postre un significado simbólico y religioso relacionado con la Semana Santa. Para maridar con las torrijas, se recomiendan vinos dulces, aromáticos y con cuerpo, que puedan complementar y equilibrar su sabor dulce. La primera opción puede ser un blanco dulce como Antojo, aunque también una buena elección sería un rosado de calidad como lo son Gurdos o Peregrino Rosado.
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